Se trata de una construcción de principios del siglo XX – antiguo casco de estancia – hoy es un icono emblemático de la zona.
Si se continua caminando, es posible encontrar un imperdible: la Gruta de Santa Teresa, a la cual se accede subiendo hasta la mitad de un cerro. Por su parte, otra de las postas religiosas para descubrir, es la capilla Cristo del Río, que contiene un crucifijo creado del tronco de un sauce. Y, para finalizar el recorrido, no puede faltar en la lista, la capilla San Antonio, uno de los tesoros patrimoniales que tiene Valle Hermoso.